La firma de whiskies celebra las seis décadas en el trono de la Reina de Inglaterra, con una edición limitada de decantadores
Seguramente Su Graciosa Majestad, la prima Lilibeth, brindará este año con Johnnie Walker y es que con motivo del 60 aniversario de su ascenso al trono, la Reina Isabel II ha encargado a Johnny Walker & Sons Scotch Whisky Distillers, una edición limitada de 60 decantadores de cristal que contendrán una mezcla de whiskies destilados en 1952 y con acabado en barrica de roble inglés del Estado de Sandringham, propiedad de la Reina. La exclusiva edición, de a 100.000 libras la joyita, se ofrecerá sólo por invitación y en venta privada. Los beneficios irán a parar a la Queen Elizabeth Scholarship Trust con el objetivo de apoyar la formación de artesanos en disciplinas tradicionales de Gran Bretaña. Un trago exclusivo pero a la altura de los fastos en honor de la prima Lilibeth, cuya finalidad bien valdrá un momento de graciosa embriaguez, pero siempre by appointment. Y que
